sábado, 26 de enero de 2019

Joan Garí al Puntal de l'Albarda (120m, 7a)


Joan Garí al Puntal de l'Albarda (120m, 7a)


26-01-2019

Hacía mucho tiempo que tenía en mente esta vía. Abierta por abajo y en libre por Alsina y Endika, solo puede indicar una cosa... emociones fuertes aseguradas! Cuando hice con Maria la Mas-Guasch me la miré desde pie de vía y ya prometía... 
La vía va buscando las placas con más agujeros y 'còdols'. En muchos momentos es difícil seguir la línea dada la escasez de los seguros fijos que tiene la vía. Aquí es cuando deberemos activar el radar, ponernos en la piel de un aperturista e intentar intuir lo más sencillo y evidente. Así es como irán apareciendo los pocos seguros que tiene la vía. Los spits se ven viejos ya, los pitones aún se salvan y los puentes de roca ni de broma aguantarían un saque. Una restauración le sentaría bien, aunque seguramente le quitaría carácter, no sé... 
Ya se sabe que la autoprotección en las placas montserratinas es laboriosa, sobre todo si no acertamos al 100% con la línea a seguir. Van entrando piezas, no siempre fiables, y algún merlet también dará apoyo moral para seguir navegando por este mar de roca. Encontramos algún tramo de unos 7-9 metros en el que no pudimos poner nada. Hay que ir valiente.
La roca es de buena calidad, aunque las pocas repeticiones hace que tenga alguna costra o 'còdol' que van petando y te pueden dar un buen susto. 


Orientación este, ideal mañanas de invierno o tardes de verano. 

De material llevamos un juego de camalots del 0,0 al 2 y cordinos para merlets y unas 10 cintas. Molaría llevar cordinos pequeños para cambiar los que hay.

Reseña de Grimpacòdols. La cantidad de seguros por largos cuadra.

En teoría el segundo largo tiene 45 metros pero mide algo menos de 35. 


L1 (6a, 40m): Desde el suelo podemos ver lo que será el primer seguro del largo, un pitón bastante oxidado en una cuevecilla a unos 5 metros del suelo. Empezamos el largo por una placa sencilla hasta el pitón y es aquí dónde empieza la fiesta... meto un totem al lado del pitón por si acaso y le tiro...voy navegando y veo el spit a unos 5 metros, salvado! Una vez en el spit hay que flanquear unos metros a la izquierda hasta un puente de roca. A partir de aquí hay que ir navegando por una placa de difícil protección hasta una bauma dónde encontraremos el segundo puente de roca del largo. Ahora nos viene una placa muy vertical con buenos cantos para entrar a la r,  protegida con un spit. Este largo en especial nos pareció difícil para el grado y además no da mucha opción a la autoprotección.



L2 (6c, 35m): Desde la r ya vemos el primer y único spit del largo (el que peor está de toda la vía), donde se concentra la mayor dificultad de la tirada. Una vez en el evidente merlet visible desde la r, el largo pasa a ser 6a (aprox...). Maria se lo curra.... ufff. Este tramo (del spit al puente de roca), es el más expuesto de la vía, no se puede poner nada, aunque no es difícil, hay que ir con mucho ojo.… También hay que tener en cuenta que el puente de roca está mucho más lejos del spit de lo que marca la reseña. Después del puente de roca rápido se caza un curioso pitón que está clavado en medio de un 'còdol' y de aquí a la r una placa brutal llena de agujeros y 'còdols' que ahora sí, será un placer para la autoprotección. 


L3 (7a, 35m): Desde la r podemos ver los tres spits que tiene el largo que es donde está toda la dificultad. Se va haciendo bien hasta que hay que salir del tercer spit, cuesta montarse sobre un gran 'còdol'. Aquí fallo y le pido a Maria que me baje (gracias!!). Le meto otra vez y con un golpe de gas me sale el paso y me pongo en el gran bolo que nos será muy útil para lazarlo como merlet. A un par de metros encima del merlet  nos encontraremos con un baumeta brutal dónde entrará un camalot del 2 a caldo. 


Ya asegurando a Maria en este largo, disfruto del atardecer en la cima y del viote que acabamos de hacer, donde ni el frío nos ha parado!! Muy contentos de que haya salido toda en libre. Una vez en la cima rapelamos por la Unitat Coronaria (a la derecha de nuestra vía) y deshacer el camino hasta el coche. 

En definitiva, para quitarse el sombrero con los aperturistas... Imprescindible el buen instinto para seguir la línea, dominio de la autoprotección, y muuuuuucho morro. Es de las que dejan buen sabor de boca.



Valoración: *****

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